En 2025 se cumplen cinco años desde el inicio de la pandemia por COVID-19 y su llegada al departamento de Caldas, exactamente reportada el 15 de marzo del 2020. Un momento que marcó profundamente a la humanidad y transformó los sistemas de salud de Caldas, Colombia y el mundo.
Durante la emergencia sanitaria, al departamento ingresaron 2 millones 302 mil 491 dosis de vacunas contra el COVID-19, incluyendo biológicos de Pfizer, AstraZeneca, Sinovac, Jansen y Moderna. La Dirección Territorial de Salud de Caldas (DTSC) implementó estrategias de congelación para preservar la cadena de frío de estos biológicos, permitiendo su adecuada distribución a los municipios, en cumplimiento de las directrices del Ministerio de Salud y Protección Social.
El 17 de febrero de 2021 se aplicó la primera vacuna en Manizales; fue en el Hospital Departamental Santa Sofía, dando inicio a la campaña de inmunización en todo el territorio. Gracias a los esfuerzos de la DTSC, la vacunación llegó incluso a los municipios más alejados del departamento y a las zonas rurales dispersas. Asimismo, se capacitó al personal de enfermería en el manejo de los biológicos, garantizando una aplicación segura y eficiente.
Jonathan David Bernal, arquitecto de la DTSC, destacó el aprendizaje institucional que dejó la pandemia: «A nivel institucional hubo un gran aprendizaje porque pudimos ver cómo, en un momento de tanta incertidumbre, logramos integrar a diversas instituciones prestadoras de salud, tanto públicas como privadas, para atender una emergencia sin precedentes. Se realizaron visitas de campo en todos los municipios, se revisaron hospitales y servicios de urgencias, y se diseñaron rutas de atención adecuadas para pacientes con COVID-19 sin afectar otros servicios esenciales».
Asimismo, indicó: “Es interesante ver cómo se logró integrar a cada uno de estos de estos hospitales y cómo se pudieron hacer intervenciones que permitieron aumentar la capacidad instalada, aumentar número de consultorios, aumentar número de camillas y habitaciones para estas personas que tenían que permanecer aisladas. Esta estrategia de fortalecimiento incluyó mejoras en los nodos regionales de La Dorada, Chinchiná, Salamina y Riosucio, así como en la ciudad de Manizales, donde se optimizó la coordinación entre instituciones de diferentes niveles de complejidad”.
Hoy, cinco años después, los resultados de estos esfuerzos son evidentes. «Lo que nos permitió salir adelante fue la integración de todos los actores del sector salud, trabajando en la misma dirección para ofrecer una atención oportuna. Gracias a ello, los niveles de mortalidad en Caldas fueron relativamente bajos y la infraestructura hospitalaria se fortaleció significativamente», afirmó Bernal.
Los aprendizajes de la pandemia han permitido mejorar la planificación y construcción de hospitales, asegurando una mayor capacidad de respuesta ante futuras emergencias. «Hoy en día, contamos con una base sólida para seguir mejorando los servicios de salud en el departamento, garantizando una atención de calidad y oportuna para todos los caldenses», concluyó.
La DTSC no solo recuerda los desafíos de la pandemia, sino que también celebra los avances logrados en el fortalecimiento del sistema de salud y la preparación para enfrentar futuros retos sanitarios.
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Jonathan David Bernal, arquitecto de la DTSC.
