La Unidad de Derechos Humanos de la Gobernación de Caldas desarrolla actualmente el programa ‘Cultura para la Libertad’, con el que apoya la resocialización de 225 personas privadas de la libertad en diversos establecimientos penitenciarios del departamento.
Entre los centros impactados se encuentran la cárcel de varones La Blanca y la cárcel de mujeres Villa Josefina en Manizales, así como los centros penitenciarios de Riosucio y Anserma y la Ciudadela Los Zagales, que hace parte del Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente.
El programa tiene como objetivo crear espacios de resocialización a través de la cultura, aplicando prácticas restaurativas. El enfoque está en la promoción de los derechos humanos y en la reconstrucción del tejido social entre los reclusos.
Los internos de estos centros han participado en diversas actividades artísticas y culturales. Entre los logros destacan: la elaboración de una canción con video musical; una cartilla escrita por los internos con mensajes sobre la resocialización y restauración; un mural, y un diccionario con palabras usadas en su vida cotidiana.
Según Lina María Salazar, jefa de la Unidad de Derechos Humanos de Caldas, este tipo de iniciativas buscan promover el respeto y la garantía de los derechos humanos entre la población privada de la libertad. “Tenemos la responsabilidad de acompañar a distintas poblaciones para garantizar sus derechos humanos, incluso a quienes han cometido errores. Este programa busca generar dinámicas que contribuyan a su dignidad y resocialización”, indicó.
Música con propósito
Las mujeres privadas de la libertad en Villa Josefina participaron en la composición de la canción que cuenta la importancia de la toma de decisiones. Ellas destacaron el impacto positivo del proyecto.
“A través de la cultura, el arte y la música pudimos expresar nuestros sentimientos y anhelos. Este proyecto me hace sentir feliz, porque podemos mostrar que aquí también hay personas con talento y cosas positivas para aportar a la sociedad”, expresó una de las internas.
Otra participante agregó que esta oportunidad les permite influir de manera positiva en la comunidad, señalando que el arte y la cultura pueden prevenir que niños, jóvenes y adultos terminen en centros de reclusión.
Pinturas que transforman realidades
La directora del Centro Penitenciario de Riosucio, Karen Ramírez Botello, resaltó la importancia del proyecto para la resocialización de los internos.
“Es un proyecto muy importante para nosotros, participaron 20 privados de la libertad, aprendieron mucho. El proyecto fue un mural que se hizo adentro del patio, fue muy organizado. Los internos quedaron muy tristes porque ya terminamos nuestro primer proyecto, así que tenemos expectativa en continuar”, apuntó.
El programa, que está en su etapa inicial, estima impactar a alrededor de 3.500 personas a través de diferentes expresiones artísticas. Con esta iniciativa se pretende disminuir la reincidencia carcelaria desde un proceso de resocialización y justicia restaurativa.
La inversión total en el proyecto fue de 150 millones de pesos, 112 millones aportados por la Gobernación de Caldas y 38 millones por la Fundación Redes de Solidaridad.
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Lina María Salazar, jefa de la Unidad de Derechos Humanos de la Gobernación de Caldas.
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Karen Ramírez Botello, directora del Centro Penitenciario de Riosucio.
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Privados de la libertad de los establecimientos penitenciarios Villa Josefina, La Blanca y Riosucio.
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*Vídeo de la canción escrita y cantada por las mujeres privadas de la libertad del Establecimiento Penitenciario y Carcelario Villa Josefina.
