Durante este fin de semana, el equipo de la Secretaría de Vivienda de Caldas realizó el seguimiento a las obras de cuatro viviendas en las veredas Altomira y Cienaga, en el municipio de San José. Allí verificó que las casas están en óptimas condiciones para ser habitadas. Estas, que cuentan con todos los servicios públicos, constan de tres habitaciones, un baño, cocina, patio de ropas y un corredor que se integra al Paisaje Cultural Cafetero.
Fredy Acevedo Valencia, uno de los beneficiarios, expresó: «Es la mayor alegría que podemos tener los campesinos, tener estas viviendas. Las casas están en muy buen estado, estamos muy contentos con la Alcaldía y la Gobernación porque de verdad las necesitábamos».
María del Carmen López, otra beneficiaria, compartió su felicidad al tener una nueva vivienda, dejando atrás una precaria casa de bahareque en condiciones mínimas y con riesgo de ruina. Ahora, ella y su nieta tendrán nuevas oportunidades en este hogar seguro y digno.
Además de cumplir el sueño de estas cuatro familias de ‘la montaña encantada’ de Caldas, el equipo de la Revolución de la Vivienda hizo verificación de obras de vivienda rural en varios municipios como Riosucio, Salamina, La Merced y Samaná, incluyendo zonas rurales de Florencia y San Diego.
“Tenemos múltiples frentes de trabajo abiertos y esperamos que -avanzando en ellos- las próximas semanas podemos concluir muchas más viviendas que beneficiarán a las familias caldenses”, agregó Alexander Tamayo, gerente del proyecto de Vivienda Rural.